Tuxtla Gutiérrez.- El Consejo Estatal para las Culturas y las Artes de Chiapas (Coneculta) rindió un homenaje al poeta chiapaneco Óscar Oliva por el 50 Aniversario de la publicación del libro Estado de sitio, con el cual obtuvo el Premio Nacional de Poesía Aguascalientes 1971.
Como parte del programa, en las instalaciones de la Casa de las Artes y las Culturas Corazón Borraz, se inauguró la Exposición Colectiva Estado de sitio, en donde a través de esculturas, fotografías y pinturas se celebra la obra poética de Oliva, piezas que permanecerán hasta el 21 de mayo.
“La poesía y las artes plásticas generan experiencias estéticas similares, por lo que, en esta ocasión, el Coneculta presenta la Exposición Colectiva Estado de sitio, en la que talentosos artistas fusionan miradas y pinceles con las metáforas del maestro Óscar Oliva; poeta de múltiples resonancias y armonías, siempre alerta al nacimiento de nuevos mundos y expresiones”, mencionó Maritsa Concepción Maranto Zepeda, directora general del Consejo.
De igual forma, la titular de la institución cultural detalló que el autor de Lascas no ha sido nada más un observador de los acontecimientos sociales y políticos que le ha tocado vivir, sino que ha participado con su poesía en los sucesos más violentos del país.
Óscar Oliva nació en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, el 5 de enero de 1937. A los 14 años escribió su primer poema “Estos minutos”, que fue publicado en el periódico El estudiante: un poema en prosa sobre la destrucción del Parque Central de Tuxtla Gutiérrez y la destrucción de sus antiguos árboles. Perteneció al grupo de poetas La Espiga Amotinada, que alentó el poeta catalán Agustí Bartra.
Su obra ha sido galardonada con premios nacionales e internacionales: Nacional de Poesía Aguascalientes, 1971; Premio Chiapas, 1990; Nacional de Periodismo, 2012; Medalla Rosario Castellanos, 2012; Internacional de Poesía Ramón López Velarde, 2013; e Internacional de Poesía Jaime Sabines/ Gatien-Lapointe, 2019.
Respecto a Estado de sitio, el poeta comparte que desde 1967 comenzó a forjar un libro no lineal, en donde tiene la posibilidad, por primera vez, de no hacer poemas sueltos, sino construir un edificio verbal y captar diversas posibilidades de poder decir las tragedias que han sucedido y de la felicidad, amor, convivencia, solidaridad humana y valores de belleza desde el punto de vista poético.
Asimismo, destaca la estructura de la obra, donde el principio se desarrolla y se entrelaza un verso con otros, con distintos ritmos y emociones.
“Agradezco mucho al Coneculta que recuerde y nos recuerde que este libro se publicó hace 50 años. Es un libro que ha tenido cuatro o cinco ediciones, que, para nuestro país, es un verdadero acontecimiento que un libro de poesía tenga tantas ediciones si lo comparamos con otros libros de poesía, o mis propios libros que han venido después y que han tenido una o dos ediciones”, puntualiza Óscar Oliva.
Con este homenaje, el Coneculta contribuye a la difusión de autores que por su destacada trayectoria literaria y humanística, así como su aportación al arte y a la cultura, son parte del patrimonio histórico cultural.
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