La Secretaría de Medio Ambiente e Historia Natural (Semahn), en colaboración con la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), impulsan el esquema de parcelas demostrativas del sistema milpa, con el objetivo de coadyuvar en el cambio de la agricultura convencional con insumos químicos a la transformación de una agricultura más sustentable y natural, con beneficios ambientales y sociales.
En este sentido, la meta de la Semahn es fomentar parcelas demostrativas en 2021. En fechas pasadas comenzó el ciclo primavera-verano, el cual es óptimo para la siembra de maíz en esta localidad. Los productores realizaron la siembra de nueve variedades de maíz nativo en una superficie de un cuarto de hectárea.
Con dicho esquema se impulsa el uso de semilla nativa y la preparación de abonos e insecticidas orgánicos, prácticas que reducen costos de producción al usar productos locales en el manejo de plagas y enfermedades, ya que se evita la compra de semillas y fertilizantes.
Así también, se reduce el uso de agroquímicos y quema del terreno en el manejo de la milpa para conservar la biodiversidad y disminuir la contaminación del suelo, el agua y el aire.
Cabe señalar que el maíz ha sido el sostén milenario de la seguridad alimentaria y promotor cultural de las comunidades rurales de Mesoamérica desde la época prehispánica.
El sistema agrícola se caracteriza por ser un policultivo que conserva la agrobiodiversidad mexicana, además de aportar maíz y frijol y otros subproductos que contribuyen a la alimentación de las familias campesinas.
La diversidad genética de las especies que se reguardan en la milpa moderna, deben ser prioridad para la sostenibilidad alimentaria.
Hay que recordar que los pronósticos por los impactos del cambio climático en la agricultura son adversos, y que la prevalencia de un mercado demandante cada vez más sostenido por la agricultura tecnificada reduce la agrobiodiversidad.
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