A diferencia de los otros presidenciables, el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, comparte muchas cosas en común con el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, que lo convierten en el candidato predilecto a la sucesión de la Cuarta Trasnformación rumbo al 2024.
Por ejemplo, lealtad al pueblo a toda prueba, así como la filosofía de ayudar a los que menos tienen, combatir la corrupción y la impunidad, además de que ambos los une la fraternidad de ser paisanos de Tabasco.
Adán Augusto también ha contribuido, de tal suerte que hace un año, cuando pidió la licencia como gobernador de Tabasco para integrarse al gabiente federal, era un desconocido para millones de mexicanos, sin embargo, hoy, no solo se encuentra dentro de la terna de presidenciables, sino que es el favorito.
Su apretada agenda de trabajo, pero también su actitud, lo ha llevado a recorrer a la mayoría de las entidades federativas donde ha sido recibido con porras, música, algarabía y con el grito unísono de ¡Presidente! ¡Presidente!, en Jalisco, Oaxaca, Veracruz, Tamaulipas, Nuevo León, Chihuahua, entre otros estados.
El tabasqueño ha ganado terreno porque ha destacado por su cercanía con diversos sectores sociales y su atención a los problemas sociales. Ha sostenido reuniones con gobernadores, líderes religiosos, legisladores, políticos, empresarios, transportistas, sindicatos, y con todos aquellos que necesitan ser escuchados.
En este sentido, el presidente Andrés Manuel López Obrador le ha reconocido públicamente su labor profesional, honesta y humana, pues “le aligera el trabajo en materia de acuerdos y conciliaciones”. Además, es su más cercano colaborador, un hombre de confianza.
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