Tras
denuncia en medio de comunicación, se inspeccionaron las instalaciones de mina
Real de Ángeles S.A. de C.V. en San Felipe, Baja California.
PROFEPA y Comité de Vigilancia Ambiental
Participativa realizan recorridos de vigilancia en zona de influencia de la
mina, sin detectar organismos de vida silvestre muertos por actividad
antropogénica.
La
Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) realizó inspección al
interior y exterior del complejo minero propiedad de la empresa Mina Real de
Ángeles S.A. de C.V., ubicada en la Delegación de San Felipe, Baja California,
en atención a una denuncia en un medio de comunicación local, sobre la supuesta
muerte de ejemplares de vida silvestre en dicho lugar.
Personal
de la Delegación Federal de la PROFEPA en Baja California no encontró
ejemplares de la vida silvestre muertos en el lugar o vestigios que pudieran
mostrar daños a la salud o muerte animal por actividad antropogénica.
Durante
la visita realizada, se observó que las instalaciones y condiciones del sistema
de irrigación son distintas a las expuestas en las imágenes presentadas en la
denuncia; que los patios de lixiviación, canales de conducción y estanques
están recubiertos de geomembrana con la finalidad de evitar derrames y
filtraciones al subsuelo.
Asimismo,
se apreció la existencia de un cerco perimetral en el complejo minero, por el
cual se hacen recorridos permanentes por razones de seguridad, así como para la
detección y reubicación de ejemplares de vida silvestre que pudieran acceder al
sitio.
La
empresa cuenta también con un cañón acústico con el que periódicamente se
emiten sonidos para evitar la presencia de aves en sus piletas de lixiviado.
Además, se comprobó que el ruido de la actividad minera que labora las 24
horas, actúa como inhibidor de la fauna silvestre.
Cabe
mencionar que como parte de sus procesos, esta mina no utiliza mercurio, sino
una solución ciaunurada, la cual es dispersada sobre el mineral pulverizado.
Con este método, se atrapa el mineral objetivo de la empresa evitando el uso
del mercurio o actividades de fundición en el citado complejo.
Personal
de la PROFEPA y miembros de los Comités de Vigilancia Ambiental Participativa
(CVAP) “Sierra Cucapah” y “Plan Nacional Agrario” establecidos en la zona,
exponen que desde el 2014 no se han detectado organismos de vida silvestre
muertos por actividad antropogénica, ni registros de muertes recientes de
borrego cimarrón.
Por
otro lado, el Presidente del Comisariado del Ejido Plan Nacional Agrario,
propietario de los terrenos donde se encuentra instalada la minera, señaló a
PROFEPA que “las fotos que aparecen en la nota de un medio de comunicación
local son viejas y no corresponden con la actualidad”.
Además,
expuso que por conducto de su representante legal, se presentará un escrito
ante esta Procuraduría, donde se deslindan de la información escrita en la
nota, ya que no han estado en contacto con el medio de comunicación que la
publicó.
Por
tales motivos, la PROFEPA invita a la población en general a realizar sus
denuncias mediante los mecanismos oficiales vigentes y, con ello, ser
copartícipes en la protección y conservación de los recursos naturales del
país.
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