Tijuana.- La decisión de levantar el plantón que el Movimiento
Antorchista sostuvo durante más de 4 meses frente a la Secretaría de
Gobernación, obedeció principalmente a la amenaza velada de un desalojo
violento, explicó Verónica Armenta Bojórquez, integrante del comité estatal de
esa organización social en Baja California.
“Retirar el plantón es un acto de racionalidad y mesura de nuestra organización, no queremos
exponer a nuestros compañeros a un enfrentamiento con la fuerza pública”,
subrayó.
La amplia cobertura que algunos medios de comunicación le dieron a las
declaraciones de comerciantes de la zona buscaban generar un clima de ambiente
hostil entre los ciudadanos y los plantonistas, además de ser contrastante con
la cobertura que esos mismos medios le dieron a los hechos que motivaron el
plantón, explicó la dirigente antorchista.
Armenta Bojórquez dejó en claro que continuará la lucha ante Segob, “El
habernos levantado del plantón no significa de ninguna manera claudicar, vamos
a dar nuestra lucha con los recursos legales que estén a nuestro alcance”.
En ese sentido, reiteró la urgencia de dar cumplimiento a peticiones
constitucionales de justicia, educación de calidad y desarrollo social, entre
otras, planteadas desde hace mucho tiempo ante la Secretaría de Gobernación federal, “los antorchistas de Baja California nos
sumamos al llamado que hace nuestra organización al Gobierno de la República
para que nos atienda y resuelva estas peticiones que están estrictamente
encuadradas en los derechos fundamentales establecidos por la Constitución”.
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