Huixtla, Chiapas.- “A mis hijos les faltó hambre,
ellos nacieron en cuna y pañales de seda. Yo crecí en la pobreza, viendo a mi
padre trabajar la tierra de sol a sol y a mi madre planchar ajeno para podernos
mantener, ambos batallando para medio comer, eso me ayudó a llegar a donde
estoy sin dejar de ser el mismo.
El amigo de
todos sin distinción de clase social ni
color de partido político.
No soy
político, nunca lo he sido ni quiero serlo, pero sí, quiero estar donde yo
pueda ayudar a la gente, a los campesinos, a la gente más vulnerable. A mi gente.
Palabras
de Régulo Palomeque Sánchez, un
campesino que vino de abajo, que supo lo que es no tener dinero mucho menos
vivir entre la riqueza.
Un campesino que aunque digan lo que digan, hizo y sigue haciendo historia en Huixtla, que demostró y sigue demostrando que cuando de ayudar se trata, ayuda de corazón al más pobre, para Régulo no sólo en época de campaña ayuda a la gente.
Para Regulo
nunca a sido tarde para dar la mano al amigo más necesitado porque el está en
el momento oportuno, esta cuando mas lo necesita la gente.
Su gente.
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