Por: Jorge Escobedo González
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Partidarios
y allegados al gobierno de turno siempre han intentado reducir las críticas y
generar una especie de ilusión laudatoria hacia las figuras que en determinado
momento ostentan el poder, en un ejercicio que sería innecesario si las
acciones gubernamentales fueran coherentes, efectivas y con resultados
sostenidos, algo que prácticamente ninguna administración logra, debido a
deficiencias programáticas, pugnas egocéntricas y malos manejos de los
recursos, situaciones que deben ser denunciadas en nombre de la legalidad y el
bien común; no obstante, las roscas se empecinan en negar la realidad y cuando
no lo consiguen emplean medios falaces, incluyendo el insulto y la
descalificación. Así está ocurriendo actualmente en Tijuana con el actual
gobierno que preside Arturo González Cruz, al ser intolerante a la menor
crítica, pero eso si, ávido del elogio zalamero.
En
la actualidad aún hay portales que tienen una línea crítica permanente, pero
también hay otros más, afines al gobierno del momento que se tornan
complaciente con el enfoque oficialista, casi a un nivel de propaganda.
Es
por ello que no extraña la virulenta proliferación de centros de redes
sociales, popularmente denominados bajo el anglicismo de netcenter, registrado
con la finalidad de atacar, cuestionar, demeritar y vilipendiar la lucha
anticorrupción, así como a operadores de justicia dignos, a medios y
periodistas independientes e incluso a ciudadanos. La violencia verbal,
epítetos, descalificaciones e incluso estigmatización moralista compartidas en
perfiles falsos y cuentas madre fueron el indicio de una sistematización de la
agresión en línea.
El
derecho a la libertad de expresión asiste a todo ciudadano para poder exponer
sin restricciones sus ideas, sentimientos y propuestas; se trata de una
facultad constitucional inalienable e irreductible, de la cual se valieron
estos perfiles para promover peligrosos mensajes de intolerancia, xenofobia,
odio y discriminación social. Tal es el caso de lo que viendo pasando con La
Síndico Procurador, María del Carmen Espinoza Ochoa, mujer con temple de acero
que, desde el inicio de la actual administración municipal, ha venido haciendo
señalamientos en contra del mismísimo alcalde municipal, Arturo González Cruz.
Lo
anterior quedo demostrado una vez más en la rueda de Prensa presentada el
pasado miércoles, por la Síndico Procuradora de Tijuana María del Carmen
Espinoza Ochoa y el Comisionado de COEPRIS en el Estado de Baja California,
David Ignacio Gutiérrez Inzunza, quienes abordaron temas relacionados con la
suspensión de las instalaciones de Servicios Médicos Municipales, además de
aclararles la información que algunos
medios virtuales tergiversaron alimentando datos y publicaciones erróneas , donde
además los funcionarios les aclararon aspectos relevantes de realidad y
masividad, reflejando extremos con los que algunos medios intentaron torcer la
opinión pública mediante informaciones engañosas, datos manipulados y noticias
adulteradas, cuyo patrón común de ataque, quedó evidenciado malversas
intenciones de quien todo mundo sabe, finalmente está abriendo los ojos del
ciudadano honrado y consciente quedó enterado luego de las respuestas de los
funcionarios a los medios de que con la salud, no se juega.
En mi entrega anterior, explique sobre el netcenterismo, que por más masivo y tecnologizado que parezca, no deja de ser un burdo intento propagandístico más, que tarde o temprano cae por el propio peso de sus falsedades, excepto quizá para sus promotores, y sobre todo sus supuestos beneficiarios, que terminan creyendo que son verdades y viven en aislamiento creado por las roscas aduladoras de siempre, hasta que chocan con la realidad. Pero que conste, no es… Nada personal, es el sentir de un aprendiz de periodista.
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