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POR: GUILLERMO SOTO
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Manuel
Velasco Coello, maestro del arte de cuchares con tardes de sol y luces por todo
Chiapas y México.
CHIAPAS
Redacción/Quihubole!!!
HUIXTLA,
a 2 de agosto de 2018.- Ahora resulta que, algunas pequeños gemidos, que no
voces discordantes. Tratan de hacer escándalo porque Manuel Velasco Coello,
está haciendo de las suyas. Y no era para menos con su capacidad e inteligencia
que posee. Pues modificó las leyes de nuestra entidad, al abrogar unas y darle
paso a otras, mediante iniciativas que sea como sea, y las hizo leyes Willy
Ochoa como presidente de la presente legislatura. No son lisonjas actuales que
le hago al mandatario estatal, en tiempo y forma aquí mismo he dejado impreso
que, sí su abuelo fue una eminencia mundial como galardonado premio Nobel de la
medicina y por ende, un sabio erudito de la neurocirugía, aquí su nieto es un
sabio de la política. Y no solo en Chiapas, sino en toda la república mexicana.
Con todo el protocolo legislativo y jurídico, es decir, sin violentar ley
alguna en nuestro país.
Se fue
de gobernador del estado y se convirtió en senador de la república, para
ostentar ese otro fuero constitucional que, le brinda inmunidad y en menos de
lo que canta un gallo retornar al terruño y ocupar nuevamente el cargo que le
conferimos la mayoría de los chiapanecos, mediante el voto secreto y universal
en el año 2012. Sí expongo que es un sabelotodo en cuestiones políticas y
electorales, es porque a menos de sus 4 décadas de edad ha tenido en sus manos
y poder la representación en todos los cargos que se le pueden conferir a un
ciudadano. Diputado local, congresista federal, senador de la república,
gobernador constitucional de Chiapas, de ahí nuevamente senador, ahora por la
vía plurinominal y retornar de nueva cuenta al Poder Ejecutivo ahora como
gobernador sustituto o como sea, pero ahí lo tenemos de vuelta.
Comparando
al político con un torero, les diré qué. Igual que los grandes maestros del
arte de cuchares, salió del redondel después de una grande y enorme faena en la
cual, no solo indultó al astado regresándolo a los toriles sino que
simbólicamente el juez de la plaza (pueblo chiapaneco) le otorgó las orejas y
el rabo, dándole vueltas al coso taurino en medio de los aplausos, mientras con
su garbo, recia figura y vestido de luces le aventaban durante su paso por el
ruedo, pañuelos, flores y demás florilegios. Prueba indiscutible de su porte
que trae de nacimiento en una cuna de abolengo y estirpe, vamos, fue creado en
pañales de seda con alcurnia y linaje. De ahí su alta clase política, amén de
tener excelentísimas amistades y relaciones que, en política, cuentan y cuentan
mucho. Lo digo y lo escribo, compadre del presidente de la república que está
por irse y, amigo muy cercano, demasiado cercano del que está por llegar al
palacio nacional.
Con
todas esas cualidades y actitudes Manuel Velasco Coello, no podía dar un
muletazo en falso y echar a perder su gran cartel por cada una de las plazas de
toros en donde se ha presentado, en tarde de luces y espectacular dotes en la
tauromaquia. En todas ellas saliendo cargado en hombros del coso después de
cada faena, dando espectáculo con su arte y haciendo fiestas con el capote,
después de ensartar las banderillas y cambiar la muleta. Hablando pues en
términos del arte de la lidia de astados. Con su traje de luces en color verde
olivo y grana torera, saldrá del redondel cuando así lo disponga. Ni antes ni
después. Así que esos de los gemidos y pequeñas voces discordantes en su
contra, debían mejor apreciar a ese regio torero, que ya supo sortear el ser
banderillero, estoqueador, novillero, lidiador, espada y hasta convertirse en
una figura como matador y torero de audacia y fino temple.
Así
como llegó un 8 de diciembre del 2012, así habrá de irse un 8 de diciembre del
2018. Por la puerta grande y en los hombros de su multitud que en su mayoría lo
aclama con vítores, loas y palmas de torero, torero, torero.
El mirador, la parte más alta de una de las paredes del Cañón del Sumidero, proyecto donde desde las alturas se observe la
belleza natural de la cuenca del caudaloso Río Grijalva
CHIAPAS PASÓ DEL 12º
AL 8º LUGAR EN CAPTACIÓN DEL TURISMO EN EL PAÍS.
Según
informe de la Secretaría de Turismo (sector) del gobierno federal, nuestro
estado en los últimos cinco años incrementó la captación de turismo en todos
los ámbitos. Pasando del doceavo al octavo lugar a nivel nacional. En ese lustro
se recibieron a 26 millones de turistas que dejaron una derrama económica de 86
mil millones de pesos en bienes y servicios a hoteles, restaurantes y
prestadores de servicios turísticos. De 863 establecimientos de hospedaje,
ahora hay poco más de 1 mil 200 y se cuentan con 3 mil 200 habitaciones
totalmente nuevas, lo que hizo un incremento del 17% en el renglón turístico
mexicano.
Esto en
base a que el presente gobierno estatal ha mejorado la imagen urbana y los
sitios turísticos tales como Palenque, San Cristóbal de Las Casas, Comitán de
Domínguez, Chiapa de Corzo, Tapachula y Tuxtla Gutiérrez. El aeropuerto Ángel
Albino Corzo en Chiapa de Corzo recibe 1 millón 300 mil pasajeros anualmente y
lo sitúa ya en el lugar 14 a nivel república de las más grandes terminales
aéreas. Y hoy subieron desde el 2012 a hoy de 4 a 7 aerolíneas que operan en la
entidad. Sin lugar a dudas estos son los benéficos resultados que se han
obtenido gracias al programa de difusión turístico que se llama Chiapasiónate,
que hizo una nueva imagen nacional e internacional de Chiapas, ante el país y
el mundo. No hay más que agregar al respecto. En turismo por ahora… todo está
dicho.
Pues
sí, se dice y escribe con suma facilidad, pero no es lo mismo hacerlo en la
realidad. El éxito que cosechó la administración y gobierno 2015-2018, que está
a punto de concluir su mandato el último día del presente mes, sí el 30 de
septiembre. Es iniciar desde un principio sin ninguna distinción para ciudadano
o negocio, la recaudación fiscal que ingresa a la tesorería o secretaría de
finanzas del municipio. Repito, no hubo distinción y menos privilegios para
nadie, se acabaron las amistades, familiaridades y compadrazgos al llegar a la
recaudación de hacienda del presente ayuntamiento.
O todos
hijos o todos entenados, cita la célebre e inmortal frase que, aquí en Huixtla
la puso en vigencia a partir del 1º de octubre del 2015, fecha en que tomó el
poder el primer alcalde de la tierra de la legendaria piedra, y que procede de
la zona rural. Sí señor, Regulo Palomeque Sánchez viene del cantón Las
Delicias, del paraje conocido como La Crucita, en donde a kilómetro y medio al
poniente de la carretera que conduce al ingenio azucarero de Huixtla, se
encuentra su hogar y rancho cañero. Todo este tiempo que fue presidente
municipal ahí vivió con su esposa, hijas y demás empleados de su pujante y
progresista bien inmueble en la zona rústica.
Escribí
la frase, porque durante el periodo del gobierno de Palomeque, todos como
contribuyente fiscales tuvimos que aportar nuestros respectivos pagos, sobre
todo del que nadie escapa y es el famoso predial cada inicio de año, aunque con
sus respectivos descuentos de un tanto por ciento en caso de aportar nuestras
liquidaciones en los primeros tres meses del año. Y ahí va como resultado de
esa honesta e intachable recaudación. De los menos de 6 millones de pesos que
se captaban de enero a diciembre anualmente, Regulo deja como norma para quien
le seguirá en el curso como munícipe 2018-2020 la tarea de sostener o
incrementar sí es posible la percepción por cobranzas municipales de más de 11
millones de pesos.
De ahí
que la secretaría de hacienda del gobierno del estado, cita en la torre Chiapas
de Tuxtla Gutiérrez, no tuvo más que incrementar el techo financiero para
nuestro gobierno y, que el presente trienio por terminar lo canalizará en obras
a cada uno de los barrios, cantones, ejidos, rancherías y por supuesto en la
cabecera municipal que es nuestra ciudad de Huixtla. Por muy mínima o pequeña
que haya sido, no se quedó ningún asentamiento humano o núcleo poblacional de
nuestro terruño, sin que se le haya realizado alguna obra en beneficio de su
colectividad. Vuelvo a decir, es fácil decirlo y escribirlo, pero muy, muy
difícil poder cumplirlo sobre todo en esta fuerte etapa de austeridad que vive
nuestro país, estado y cada uno de los municipios de toda la república.
Tengo
tiempo aún para ir enumerando aquí mismo en Miscelánea, como un legado de
gratitud por parte de mi pueblo, cada una de las gestiones concretizadas en
obras que realizó el gobierno que está por entregar cuentas y responsabilidades
al siguiente administrador de nuestro pueblo. No solamente fue introducción de
drenaje, agua entubada, pavimentación con concreto hidráulico, alumbrado
público, electrificación rural, apoyos para adultos de la tercera edad,
seguridad que tanto exige y adolecen por todas parte, no solo de Chiapas sino
de todo México. Es cierto que al inicio de robaban diez o doce motocicletas al
día, ahora son una o dos por semana. También hay robos a casas habitación, una
cada mes, ya no desaparecen los vehículos y eran encontrados deshuesados del
otro lado de la frontera.
Nadie
mejor para atestiguar tales hechos y realidades que, el escribiente del único
medio de comunicación impreso que existe en Huixtla. Aquí damos pelos y señas
con tinta y papel día a día desde el año 1960 que fue fundado el periódico El
Informador. Hemos visto pasar no solo presidentes de la república,
gobernadores, senadores, diputados federales y locales, ya no se diga nuestros
presidentes o alcaldes de nuestro municipio. Las obras son diversificadas y
necesitamos tanto en Huixtla, que lo mucho que se hace es similar a tirar un
balde de agua dentro de un desierto, pasa casi imperceptible para la sociedad,
para la ciudadanía, para el pueblo que cada vez pide y exige más. Muchos somos
exigentes y no somos recíprocos en cumplir, claro que tenemos derechos, pero
también obligaciones que, no nos gusta cumplir con responsabilidad.
Voy a
cambiar la famosa frase de calma Coita, solamente hoy para asentar ahora:
¡Calma Huixtla que ya vamos ganando!
Finalmente.
Qué susto nos hicieron pasar con el fatal accidente dónde perdió la vida constructor
de Villa Comaltitlán, Jardi Ramos al salirse de la carretera costera, entre
Huixtla y Huehuetán el sábado 1º de septiembre, al estamparse con un árbol y
morir instantáneamente. Iba a bordo de una camioneta negra Ford Ranger,
propiedad del amigo y paisano Carlos Eduardo Salazar Gam. Corrió la voz como
reguero de pólvora que, el occiso era él. Todo fue una confusión. Lamentable
eso sí, la muerte del conductor.
¡Buen
Día!
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