Por: Exal Baltazar Juan Avila/APyPM |
VERDE
Hace años,
después de las protestas por la vivienda de la gente, la
elección de un nombre y el vencimiento de la fecha de entrega, surgió el parque
Bicentenario, hoy Parque Cultural Bicentenario.
En un tiempo le llamaron “el parque para los viejitos”,
pues se consideraba un proyecto para la recreación del adulto mayor, una vez
terminada la obra, resultó ser una auténtica belleza con enormes frondosos
árboles de colorida iluminación, sus fuentes danzarinas llenas de música y
luces como salidas de un cuento de hadas, los techados bajo los cuales aún se
puede encontrar a jóvenes y adultos bailando a distintos ritmos.
El cambio de un simple parque bonito a parque cultural,
como lo es ahora, significa, además de la activación y provecho de tan
agradable espacio público, un progreso para la población en general.
Con mucha frecuencia se llevan a cabo en éste atractivo
parque distintas actividades de cultura y sano esparcimiento, como fue el caso
de la feria de san José, la cual incluyó un
variado programa de música y danza de distintos estilos, en los cuales
pudimos apreciar la participación de cantantes locales quienes con su bella voz
y ameno trato al público nos deleitaron como las escuelas y estudios de danza
folclórica, moderna, hawaiano y polinesio al mostrarnos un poco de otras
culturas; además de se contó con la presencia y agradable sonido de la
tradicional marimba municipal.
En el margen del mismo evento, tuvo lugar también el
Festival de las Culturas Amigas, cuyos exponentes dieron a conocer artesanías y
bebidas propias de Zinacantán, Perú, Japón y Líbano, como el agua de chicha
morada, el té de mate, en el caso de Perú, preciosos bordados y bisutería de
Zinacantán, galletas japonesas, joyería libanesa entre otras cosas junto con
las exposiciones de pintura del ya conocido pintor local Shelty maestro del
aerógrafo y los cuadros al óleo de Ángel Waz, prodigio oaxaqueño.
Aunado a estos dos
grandes eventos, se cerraron labores para dar paso a semana santa con un
grandioso concierto por parte de la Orquesta de Cámara del Soconusco.
AMARILLO
Luis Velásquez, profesor de artes plásticas y representante
de Líbano en el Festival de las Culturas Amigas, hablaba de la importancia de
enriquecer la cultura y eventos como el festival en Tapachula, pues en palabras
de él, falta apoyo real por el deseo de crecer y la cultura propia de la gente,
falta información pública de mano de los oriundos o en tablillas para dar a
conocer a los demás las riquezas de nuestra región quitar prejuicios y
paradigmas pues juzgan al arte por quien lo hace y a quien lo hace por su
apariencia, lo cual demuestra, nos comentaba que el cómo artesano y artista
plástico sufrió discriminación aquí, “fue por mi imagen; es una mala caricatura
de su ideal , quien lo hizo si tuviera un IQ más alto no criticaría a los
demás”.
Pese a estos estigmas sociales, cada día se suman más
colectivos, agrupaciones, artista independientes y organismos a la causa del parque cultural y el instituto de cultura por llevar arte en abundancia y
enriquecerla mente de la ciudadanía, hacen falta manos… o recursos, para
rehabilitar la infraestructura de lo que una vez fue un hermoso parque. Así
encontramos el bicentenario: con fuentes que no bailan, ni agua tienen
(problemas con COAPATAP, dicen por ahí), falta de iluminación decorando los
arbolitos, tomas de corriente sin electricidad, mesas y sillas en lamentable
estado, pero la fuente de piso, por Dios… esa está rota y e visible y palpable
a simple vista. El parque es rico en actividades, pero su apariencia es triste
de ver, la gente se queja pero esto es culpa de todos, del gobierno por no
designar un presupuesto para el mantenimiento del inmueble y de la propia
ciudadanía al ser incapaz de cuidar sus espacios públicos. ¿Por qué culpar a la
ciudadanía? Por esas curiosas personas que tienen por costumbre poner botellas
tapando las salidas de agua de las fuentes, quienes tiran basura en las
alcantarillas y jardineras con tantos botes para hacerlo.
ROJO
En estos días ha tenido lugar un problema igual o más grave
que la falta de cultura de la población y las malas costumbres de la misma, se
trata de algo serio pues además de molesto representa un peligro para todas las
personas en el Parque Cultural Bicentenario, para la gente que sale a
distraerse, los empleados de los negocios, los religiosos al salir de la iglesia
(o entrar), y sobre todo, para los niños y adultos mayores. Se trata de la
educación vial.
Es vergonzoso admitirlo, pero a nuestra sociedad le falta
educación vial, no sabemos los motivos, quizá es ignorancia, tal vez flojera,
cinismo, carencia de instinto de auto conservación, ceguera, o solo el nulo
sentido común en cada uno, lo cual está transformando un lindo Parque Cultural
en un peligroso parque vial donde las motocicletas de Conexia, Financiera
Independencia y de jóvenes irresponsables transitan haciendo trucos y maromas
entre la gente así como los automóviles, taxis y camionetas en su mayoría,
cuyos choferes adoran subir al parque en distintos puntos. Pese a que en el
parque hay múltiples acotaciones indicando la prohibición de motocicletas y
automóviles en el mismo, la gente hace caso omiso de ello y aunque no hubiera
tales indicaciones pegadas en los postes y cerca de las rampas, por sentido
común no subes un auto a un parque donde todo el tiempo hay gente paseando,
niños que corren y juegan libres tranquilamente como es propio en cualquier
parque.
Si importar cuánto se esfuercen los funcionarios públicos
de IMCA y la Dirección del Parque, los clérigos de la cripta, aun cuando se
acercan a pedir amablemente la cooperación de los conductores para evitar este
problema y cualquier posible incidente,
a los choferes no les interesa pues les gusta la mala vida; mientras no haya un
agente de tránsito ahí para multarlos, llamar a la grúa, quitarles las placas y demás, a los choferes se les resbalan las palabras para pedirles que
tengan un poquito de educación vial y sentido común.
Por lo visto, la
única solución es contar con un oficial de tránsito en el parque en todo
momento para educar a la gente, a esas personas de las cuales no sabe uno como
le hicieron para obtener su licencia de manejo siendo tan incapaces de respetar
normas y reglas obvias y simples de vialidad.
Denuncias y
comentarios: periodistaexal2015@hotmail.com
Cel. y Wts. 962 10 80 934 Tapachula, Chiapas, México; 01042016
No hay comentarios:
Publicar un comentario