TIJUANA,
a 1 de noviembre de 2017.- Sin lugar a dudas el señor Arturo Gutiérrez, a las
de agüerzas quiere ser uno de los dirigentes más inteligentes de los que existen en la
actualidad. Y no es que sea yo fan del señor Arturito, simplemente en ocasiones
me da por reconocer lo que son los demás, y este señor es que ni con cal se
pela para eso de que ahora quiera andar haciendo política, y de pelearse con
los demás.
Creo más
bien que es uno de los mayores especialistas en endilgar culpas a los demás y
en aparentar una limpieza y pulcritud que no tiene. Para decirlo de otra forma,
es el mayor cínico e ignorante de cuantos haya conocido en el espectro
político, y mira que en ese espacio hay mucho de lo que digo y acuso.
El hoy
famoso “tontury” no es otro más que un verdadero cínico, pero hasta ahora no
hay quien lo ponga en su lugar, bueno hay uno, José Luis Parra. No sé si los
trabajadores de la burocracia le tienen miedo o simplemente prefieren no
meterse en problemas y sigan peor que los perritos que no quieren abrir los
ojos.
Primero
lo de las primas vacacionales que afectaban a los burócratas en sus
liquidaciones, después lo de las expulsiones de los ex dirigentes, donde José Luis
Parra tras ser entrevistado le endilga en la cara que “el tontury” que como dirigente sindica esta jodido y que mejor se ponga a trabajar.
Pero en vez de eso, el flamante dirigente de los burócratas cometió la semejante burrada de pretender enfrentar nada mas y nada menos que al patrón, al mismísimo Presidente Municipal, lo peor del caso es que sin dar la cara, lo que aquí y en China es un ACTO DE COBARDÍA.
La
verdad, nunca había visto al “tontury” en problemas como el que ahora se ganó tras haber convocado a los burócratas a palacio municipal para confrontar a los burócratas
contra quien no debió hacerlo nunca, nada más y nada menos que contra el presidente
municipal Juan Manuel Gastellum Buenrostro.
Y es que
el flamante dirigente sindical nunca se imaginó que el tiro la saldría por la
culata, ya que en la manifestación se pudo entrever que “el tontury” aparte de ser
“un zacatón”, demostró una vez más su estupdez, ya que al confrontar los trabajadores contra el patrón, lo único que
logró es prenderle fuego a lo que será una guerra sin cuartel en la que los afectados
serán los mismos burócratas.
O dígame,
si alguien llega a su casa, se mete no solo a la sala sino hasta la cocina y
aparte de eso en vez de dialogar pacíficamente lo insulta, lo ofende y hasta le
grita y lo agrede, ¿usted le brindaría respaldo y apoyo para una petición o
demanda que le hicieran? Ni loco. Más bien la respuesta hubiera sido darles una
buena paliza.
Y la
verdad sea dicha, si no se dieron actos violentos fue porque el alcalde soporto
con sapiencia que con tal provocación la violencia se hubiera suscitado, ya que
como autoridad bien pudo con tan solo una seña los uniformados hubieran iniciado
el desalojo de palacio.
Pero lo
más triste y vergonzoso fue que el autor intelectual de dicho desmán nunca dio
la cara mucho menos al tanto de los sucesos, el señor y flamante dirigente
sindical andaba de gira por el sureste del país en un acto político, acompañado
de dos preciosas edecanes así como de su asistente, seguramente con gastos
pagados por los burócratas.
“El
tontury” bien pudo haber llegado y estar al frente de sus representados, pero no,
no quiso moverse de donde estaba y en el pecado llevo la penitencia. Finalmente
el patrón fue quien ganó la partida, en cambio el señor “bueno para nada” nunca
estuvo en riesgo de enfrentar a quien le debe haber llegado al cargo que ahora
ostenta.
“El
tontury” hizo lo que tenía que hacer, pero nunca contó con que uno de sus subalternos
seria quien quiso alzar los brazos en son de triunfo, sin embargo, quedo como
un perfecto inútil e idiota haciendo público su ineptitud al no saber aprovechar
la oportunidad de dialogar pacíficamente para lograr, cuando menos, uno de los tres
planteamientos que querían los trabajadores.
Ante las
incongruentes acciones logradas como dirigente municipal y estatal de los burócratas,
es evidente que “el tontury” lo que ahora pretende es alcanzar una escaño político,
según él, ahora que se encuentra en los cuernos de la luna con el apoyo de los burócratas
bajacalifornianos.
Así de
mareado está el “tontury” desde que ascendió el cargo el señor Arturo no da una,
y como van las cosas, parece difícil que la alcance a dar. Lo previsible es que
ante su desmedida ambición sirva para que sus representados, los burócratas, se
den cuenta que no puede como dirigente menos podrá como candidato, lo más predecible
es que al señor “tontury” no le alcance su
disminuida presencia, por lo que tendrá que buscar por otro lado donde pueda hacer
ronchita con posibilidades de no salir raspado. Lo que también stakabrown por
el rumbo que lleva. Este irreverente columnista en su próxima entrega les refregará
en la cara a los burócratas por qué ahora lamentan haber votado por el tontury
y no por Jose Luis Parra. Pero que conste, no es… Nada Personal.