QUIHUBOLE/HUIXTLA, CHIAPAS/25/01.15.- Todo parece indicar que Chiapas se
ha convertido en un pueblo sin ley, un pueblo donde todo aquel que ostenta una
placa o una charola de gobierno, le da poder para hacer desmanes y todo lo que
le venga en gana sin que exista autoridad alguna que se los impida.
Cualquiera que se diga “empleado de gobierno” u ostente una credencial
de gobierno, federal, estatal o municipal, las órdenes del gobernador del
estado se la pasan por el arco de triunfo, es palabra muerta lo que diga Manuel
Velazco Coello, nadie le obedece y todos hacen lo que le venga en gana.
Lo anterior sale a colación, luego que en días pasados, una familia fue
víctima del abuso de autoridad de personal de migración de la caseta aduanal
Huixtla-Villa Comaltitlán, donde una oficial trató de golpear a una periodista luego
de mantenerla privada de su libertad por más de dos horas y asustar a los niños
que la acompañaban.
Lo anterior denunciado por la profesora Fabiola Camas Espinosa, quien
en forma violenta fue bajada del carro lo mismo que sus cuatro hijos, quienes
al ver que eran jaloneados con prepotencia por la oficial de nombre Bárbara
Moreno Serrano, pidieron auxilio a un militar.
Tanto la profesora como sus hijos, coincidieron en decir que al pasar
la aduana los intimidaron y trataron con prepotencia tras bajarlos como
delincuentes, sin impórtales que los niños asustados a gritos pedían que la
oficial de migración no los maltratara, lejos de eso, la energúmena mujer les
volvió a gritar y en forma amenazadora les dijo que ahí la que manda es ella y la
tenían que obedecer.
No conforme con tanto abuso de autoridad y tras retener por más de dos
horas por órdenes de la oficial, la periodista Keny Camas por mas intentos de
convencer a la oficial diciéndole que sus familiares no habían cometido ningún
delito, lo que logró fue que la tal Bárbara Moreno haciendo honor a su nombre,
trató de golpear a la periodista.
Ante tales hechos, tanto los agraviados como la periodista, acudieron
ante Derechos Humanos para denunciarlos, no sin antes pedir la intervención de
las autoridades superiores, ya que estos funcionarios siguen cometiendo abusos
y atropellos contra la ciudadanía.